Fabiola Yañez denunció hoy a Alberto Fernández por violencia física y hostigamiento. En su declaración ante el juez Julián Ercolini aseguró que el ex presidente la acosa “a diario” por teléfono y que la somete a “terrorismo psicológico”, por lo que pidió medidas de protección.

“El presunto agresor se contactaba mediante mensajes telefónicos amedrentándola psicológicamente”, dice el acta de la audiencia, a la que tuvo acceso el diario La Nación.

El abogado de Fabiola Yañez: "La denuncia entiendo que la hizo por los golpes"

De acuerdo con esa información, la ex primera dama le dijo al juez que Fernández intentaba comunicarse con ella a través del teléfono de su madre; es decir, la ex suegra del ex mandatario.

“Yañez fue interrogada acerca de si, en esta oportunidad, deseaba instar la acción penal, a lo que la compareciente manifestó expresamente que a raíz de lo ocurrido, deseaba hacerlo”, consta en el acta.

Por estas razones, Ercolini le impuso a Fernández que cese “en los actos de perturbación o intimidación que, directa o indirectamente, realice hacia Fabiola Yañez tanto en el espacio analógico como el digital”.

Violencia de género: tras la denuncia de Fabiola Yañez, le prohibieron salir del país a Alberto Fernández

La denuncia fue hecha por la propia Yañez, sin participación de un abogado. Según fuentes consultadas por el mencionado medio, Yañez no estaba conforme con la “representación” mediática que hizo durante las últimas horas el abogado Juan Pablo Fioribello.

Además, Yañez expresó preocupación por la custodia policial que tiene asignada. Según ella, se trata de una “persona de confianza” de Fernández y le pidió a Ercolini que disponga medidas para protegerla.

Tras esa declaración, el juez resolvió: “Imponer a Alberto Ángel Fernández que cese en los actos de perturbación o intimidación que, directa o indirectamente, realice hacia Fabiola Yañez tanto en el espacio analógico como el digital”.

Fabiola Yañez denunció a Alberto Fernández por “violencia física y hostigamiento” ante la Justicia

Además de la prohibición para salir del país, Ercolini ordenó librar oficio al Ministerio de Seguridad de la Nación para que arbitre “los medios necesarios para reforzar la custodia dispuesta” en favor de Yañez, “brindando a este juzgado toda la información que posea respecto de cómo se encuentra desempeñando dicha función actualmente”.

La prohibición de acercamiento es en un radio de “500 metros del domicilio en el que ella reside en Madrid y en cualquiera en el que se encuentre desempeñando actividades laborales, educativas, recreativas o de asidua concurrencia”. Ercolini es terminante. Dispone una “absoluta” prohibición de contacto absoluto con ella, cualquiera sea la vía.